El melocotón, la nectarina y el paraguayo son tres variedades de frutas de hueso que, aunque comparten ciertas similitudes, tienen características propias que las hacen únicas. Estas frutas, emblemáticas del verano, se destacan por su dulzura y frescura, además de ofrecer una amplia gama de beneficios para la salud. En España, su temporada comienza a partir de mayo y se extiende hasta septiembre, con algunas variedades que pueden encontrarse hasta octubre, dependiendo de la región y el clima.
Melocotón y nectarina, frutas protagonistas del verano
El melocotón es quizá el más conocido de los tres. Su temporada fuerte abarca los meses de junio a septiembre, siendo julio y agosto los momentos de mayor producción y calidad. El melocotón se cultiva principalmente en las regiones de Aragón, Cataluña, Murcia y Andalucía. Existen distintas variedades de melocotón, como el melocotón amarillo y el melocotón blanco. El primero tiene una piel aterciopelada y una pulpa firme, con un sabor dulce y ligeramente ácido, mientras que el melocotón blanco tiene una pulpa más suave y un sabor más delicado. Esta fruta es rica en vitamina C, antioxidantes como el betacaroteno y fibra, lo que la convierte en una excelente aliada para fortalecer el sistema inmunológico, proteger la piel y mejorar la digestión. Además, gracias a su alto contenido en agua, es una opción perfecta para mantenerse hidratado durante el verano.
La nectarina, aunque similar al melocotón, se diferencia por su piel lisa y brillante. Su temporada también coincide con la del melocotón, extendiéndose de junio a septiembre. Las nectarinas son ligeramente más firmes que los melocotones, y su sabor tiende a ser algo más dulce y menos ácido. En cuanto a sus beneficios, la nectarina comparte las mismas propiedades que el melocotón, siendo una notable fuente de vitamina C y antioxidantes, esenciales para combatir el envejecimiento celular y mantener una piel radiante. Además, su bajo contenido calórico y su capacidad para promover una buena digestión la convierten en una fruta ideal para incluir en dietas saludables.
Paraguayos exóticos, extremadamente dulces y jugosos
El paraguayo, por su parte, es fácilmente reconocible por su forma aplanada y su piel fina. Su temporada comienza en mayo y se extiende hasta finales de agosto o principios de septiembre. Los paraguayos destacan por ser extremadamente dulces y jugosos, lo que los convierte en una opción muy apreciada por los amantes de las frutas frescas. Además de ser ricos en vitamina C, también contienen vitaminas del grupo B, que son esenciales para el buen funcionamiento del sistema nervioso. Al igual que sus “primos”, el paraguayo es bajo en calorías y alto en fibra, lo que lo hace perfecto para mejorar la digestión y mantener el cuerpo hidratado.
Cada una de estas frutas tiene su momento óptimo durante el verano, siendo frescas, nutritivas y versátiles. Su consumo no solo aporta beneficios para la salud, sino que también promueve el bienestar general gracias a su aporte de antioxidantes, vitaminas y fibra. Además, tanto el melocotón, como la nectarina y el paraguayo, pueden disfrutarse de diversas formas: frescos, en batidos, ensaladas o incluso en postres, como los melocotones en almíbar o tartas.
Frutas imprescindibles durante los meses de verano
En resumen, el melocotón, la nectarina y el paraguayo son frutas imprescindibles durante los meses de verano en España. Su frescura y sabor, combinados con sus propiedades nutricionales, hacen de estas frutas una opción excelente para disfrutar de una dieta equilibrada, mantener el cuerpo hidratado y cuidar la salud. Aprovecha la temporada y disfruta de estas delicias en su mejor momento.
